Me voy a permitir el lujo de repartir la entrada en un par o tres capítulos, pues creo que en sólo uno no voy a poder mostraros lo que vimos, sentimos, oímos, etc, en esta gran ciudad. Chicago, también conocida como la Ciudad del Viento.
Nada más llegar, nos alojamos en nuestro hotel, justo al lado de este otro hotelito.
Nos instalamos, nos refrescamos un poco y salimos para dar una vuelta, a modo de toma de contacto para ubicarnos y planear el qué, cómo y cuándo de los próximos tres días que vamos a pasar aquí.
Evidentemente no podía dejar pasar la ocasión de quedarme un rato a oír, ver y fotografiar el evento.
Continuamos nuestro paseo y pudimos comprobar que aquí la música se vive. Vimos , mejor oímos , a Michael Jackson, su famosa canción Billie Jean a todo trapo, nos damos la vuelta y vemos aparecer a una pareja en una moto, moviendo la cabeza a ritmo del sonido.
Curiosamente no era una Harley, sino una Honda Goldwing, ¡ y cómo sonaban, moto y música !
En esta ciudad, con su línea de Metro aéreo en su mayoría del entramado, recorre la ciudad inundando de ruido a hierro sus calles
Seguiría poniendo
fotos, pero no quisiera hacerme pesado, pero es que esas vías y esos puentes me encandilaron.
También hay autobuses...y una
de sus paradas me llamó la atención por el anuncio que había.
No es que tenga nada de especial, pero es mayormente por la cámara que
publicita. Algunos ya sabréis por qué lo digo, jejeje
Seguimos caminando y llegamos a un lugar que me resultó mágico, sobre todo por la alegría que se vivía en ese sitio, que es Crown Fountain, en Millennium Park, del cual podéis ver parte de las fotos que hice aquí. Por eso, nada más pondré una imagen como muestra.
Bueno, os dejo por ahora y hasta que tenga preparada la siguiente tanda.
Sed buenos y buenas.